Composición: Cada sobre con 5 g de granulado contiene: Citrato de Potasio Monohidratado 3.3 g (eq. a 30.5 mEq de potasio), Acido Cítrico Monohidratado 1 g. Excipientes c.s.
Acción Terapéutica: Alcalizante urinario de acción sistémica.
Indicaciones: Este alcalinizante urinario está indicado en aquellas condiciones donde es deseable mantener una orina alcalina por un tiempo prolongado, como en pacientes con cálculos de ácido úrico y cistina del tracto urinario, especialmente cuando la administración de sales de sodio es indeseable o está contraindicada. Efectivo también para el alivio de la acidosis metabólica crónica, particularmente cuando es causada por acidosis tubular renal. Altamente valioso en la prevención de la nefropatía ácido úrica cuando es administrado a pacientes que tienen hiperuricosuria debido a defectos metabólicos (por ejemplo gota) o por quienes están recibiendo medicamentos (por ejemplo quimioterapia del cáncer o agentes uricosúricos), que traen como consecuencia un aumento crónico o agudo de la excreción de ácido úrico. Ha sido reportado que el citrato de potasio es efectivo en el control de los cálculos de oxalato de calcio/ ácido úrico. Cuando es administrado en la dosis deseada, este producto alcaliniza la orina sin producir una alcalosis sistémica.
Propiedades: El citrato de potasio se absorbe y metaboliza a bicarbonato de potasio, por lo tanto actúa como un alcalinizante sistémico. Los efectos son esencialmente los de los cloruros antes de la absorción y los de los bicarbonatos, subsecuentemente. La oxidación es virtualmente completada de modo que menos del 5% del citrato de potasio es excretado en la orina sin cambio.
Posología: Reconstituir 5 g de granulado (1 cucharadita de té llena) con al menos 200 ml de agua (1 vaso lleno de agua) y tomar después de las comidas o antes de acostarse. Dosis usual: 1 sobre de 5 g disuelto en al menos 200 ml de agua, 4 veces al día, que mantendrá el pH urinario de 6,5 a 7,4.
Efectos Colaterales: El producto es generalmente bien tolerado y no produce efectos adversos cuando se administra en las dosis recomendadas a pacientes con función renal y producción urinaria normal. Sin embargo, como con cualquier agente alcalinizante, debe ser usado con precaución en ciertos pacientes con mecanismos renales anormales, para evitar el desarrollo de hiperpotasemia o alcalosis. La intoxicación por potasio provoca fatiga, debilidad, confusión mental, hormigueo de las extremidades y otros síntomas asociados con una alta concentración de potasio en el suero. Se deberían realizar determinaciones periódicas de electrolitos séricos en aquellos pacientes con enfermedad renal, con el fin de evitar aquellas complicaciones. La hiperpotasemia puede ser detectada a través de las anormalidades que produce en el electrocardiograma.
Contraindicaciones: Está contraindicado en caso de daño renal severo con oliguria y azotemia, enfermedad de Addison no tratada, adinamia episódica hereditaria, deshidratación aguda, calambres abdominales, anuria, daño miocárdico severo e hiperpotasemia de cualquier etiología. Grandes dosis pueden causar hiperpotasemia y alcalosis, especialmente en presencia de enfermedad renal. La administración concomitante de medicamentos que contienen potasio o glicósidos cardíacos puede producir toxicidad.
Precauciones: Debe ser usado con precaución en pacientes con baja producción urinaria, en cuyo caso se recomienda la supervisión de un médico. Se debe instruir a los pacientes, de manera que reconstituyan adecuadamente el producto en agua, para minimizar la posibilidad de daño gastrointestinal asociado con la ingestión oral de preparaciones de potasio concentradas. Además, se recomienda la administración de cada dosis después de las comidas, con el fin de evitar el efecto laxante salino.
Sobredosificación: La administración de sales de potasio orales a personas con mecanismo excretor normal de potasio, raramente causa una hiperpotasemia seria. Sin embargo, si los mecanismos excretores están dañados, la administración de estas sales puede ocasionar hiperpotasemia la cual cuando es detectada debe ser tratada inmediatamente porque los niveles letales pueden alcanzarse en pocas horas. Las medidas a tomar ante una hiperpotasemia son las siguientes: Restricción de alimentos o medicamentos que contienen potasio. Administración intravenosa de 300 a 500 ml/h de solución de dextrosa (10% a 25%), que contenga 10 unidades de insulina/20 g de dextrosa. Uso de resinas de intercambio, hemodiálisis o diálisis peritoneal. Cabe destacar que en el tratamiento de la hiperpotasemia en pacientes que han sido estabilizados con digitálicos, una disminución rápida de la concentración plasmática de potasio puede provocar toxicidad digitálica.
Presentaciones: Envase conteniendo 50 sobres o sachets (incluye cinta de pH y registro de lecturas). Sabor naranja.