Composición: Cada cápsula contiene: Amantadina Clorhidratro 100 mg.
Mecanismo de Acción: Actúa liberando dopamina de las terminales dopaminérgicas intactas que quedan en el cuerpo estriado y el locus niger (sustancia gris que separa las capas superior e inferior de sustancia blanca de los pedúnculos cerebrales) de los pacientes con la enfermedad de Parkinson. Se ha comprobado además que retarda la recaptación de la dopamina por las células neurales y también surtiría efectos anticolinérgicos.
Posología:Enfermedad Parkinson: iniciar con 2 cápsulas; 1 en la mañana y 1 al mediodía (D.U. 300 mg/día). Influenza: la dosis de prevención y tratamiento de la influenza A es de 2 cápsulas al día. Puntos promocionales a destacar: en enfermedad de Parkinson constituye un agente útil para combatir la enfermedad con un índice de rehabilitación del 66% en una medicación sostenida. Sólo al comienzo del tratamiento como terapia inicial. Más tarde asociado a levodopa o carbidopa. Es particularmente efectivo contra la bradisinesia, con baja incidencia de efectos atropínicos, aun en pacientes ancianos es bien tolerado. Sólo al comienzo permite ganar un tiempo importante antes de que la levodopa llegue a ser necesaria. Permite mantener una terapia efectiva cuando la toxicidad de la levodopa indica que se debe reducir la dosis. Prayanol en Influenza A. perfil: amantadina inhibe la replicación de las cepas del virus A de la influenza en un punto temprano, probablemente la etapa de la descobertura. La adherencia del virus a las células y su penetración no están afectadas. Usando un análisis sensible de reducción de placa casi todas las cepas de virus A de la influenza, incluyendo H3N2, HSW1N1 y H1N1 subtipos, se inhiben con 0.4 mg/ml de amantadina o menos. Concentraciones mayores de las que pueden alcanzarse sin peligro en el hombre se requieren para inhibir los virus de influenza B, rubéola y otros virus. La amantadina se absorbe casi totalmente del tracto gastrointestinal. Aproximadamente el 90% de 1 dosis administrada oralmente se excreta por la orina (50% en 20 horas) sin cambios; la droga no se metaboliza en el organismo. Numerosos estudios han demostrado la efectividad de este compuesto para prevenir la infección de cultivos de tejidos y animales de experimentación por diferentes cepas de virus A de influenza. Se ha realizado un número suficiente de estudios, para saber que la amantadina tiene valor profiláctico cuando se administra a personas que han tenido contacto con un caso activo de influenza A o que han servido como sujetos experimentales para esta infección. La droga es valiosa en marcos nosocomiales o comunitarios. En estudios de doble ciego controlados con placebo en pacientes con infecciones naturales debidas a virus influenza A, se ha comprobado que la droga produce un efecto terapéutico, incluso cuando se administra durante las primeras 48 horas que siguen a la iniciación de la enfermedad. El uso de amantadina se recomienda en presencia de una epidemia documentada de virus de Influenza A en pacientes de todas las edades de alto riesgo que no han sido vacunados. La administración profiláctica a pacientes de alto riesgo debe iniciarse tan pronto como la actividad de la influenza A se documenta en la comunidad y continuar mientras dure la epidemia (generalmente 5 ó 6 semanas). Como la droga no deteriora la respuesta inmunológica a la vacuna antiinfluenza, los pacientes pueden vacunarse al mismo tiempo suspendiendo la amantadina después de 14 días. La administración a pacientes con enfermedad establecida es tema de controversias. Algunos sugieren que el tratamiento se justifica si puede comenzar dentro de las 48 horas de la aparición de los síntomas. La dosis es de 200 mg por día durante 5 a 7 días. Niños: De 1 a 9 años: la dosis es de 4.4 a 8.8 mg/kg, pero no debe exceder de un total de 150 mg/día. Mayores y adultos: la dosis es de 200 mg, 1 vez por día ó 100 mg 2 veces al día.
Efectos Colaterales: Comparando con levodopa o agentes anticolinérgicos, Prayanol (amantadina) está relativamente libre de efectos secundarios, éstos son generalmente leves, a menudo transitorios y siempre reversibles. Ocurren más alucinaciones, confusión y pesadillas cuando la droga se administra junto con agentes anticolinérgicos.